Andorra. Este país nos cautivó la primera vez
que lo visitamos con el famoso GR11 y con otros senderos preciosos. Es lo que
tiene el Pirineo… son montañas que te hacen superarte paso a paso, ruta a ruta,
momento a momento… esta vez con algo de nieve. En cada una de las cuatro
estaciones está el mismo paisaje pero con diferentes características,
diferentes colores… ¡la naturaleza es así de caprichosa!